"El hombre núnca mira al cielo porque siempre lo tiene a la vista."

martes

En Resumen...

Todas las noches antes de dormir (o mientras trato de hacerlo) siempre y de manera involuntaria me pongo a pensar en las cosas que hice durante el día. Lo mismo al despertar. Me levanto mientras pienso en las cosas que podría hacer.

Pero durante estos últimos días me he levantado y acostado pensando únicamente en la opción que tome hace un par de semanas, de la cual no he dejado de pensar si esa decisión fue o no correcta puesto que de todos modos de una u otra forma iba a tener las mismas repercusiones, las mismas problemáticas y el mismo daño interno.

Sí, por un instante me pregunte ¿qué estoy haciendo? ¿Hasta donde llegaré con esta actitud? Pero después de pensar arduamente respecto a mis actitudes me di cuenta que llegar a tales situaciones solo con el fin de satisfacer los deseos de los demás, eso me frustro bastante y no por el hecho de ellos, sino por el mío porque si bien, aprendí demasiadas cosas de la vida y veo que de todo eso nada ha podido o ha sido aplicado en mi.

Pienso a veces que no estaría mal salir de santiago al menos en las vacaciones de invierno que están prontas a llegar, salir y perder el contacto con todo, talvez al campo supongo. Pienso (no pienso, creo) que me hará bien estar fuera de la ciudad principalmente para distraerme y relajarme. Y que realmente es algo de lo que estoy esperando hace bastante tiempo solo hay que tener la esperanza de que climáticamente sea un día beneficioso para viaja puesto que a donde pienso ir las probabilidades de cancelar el viaje por una simple lluvia es mayor en época invernal, claro esta. Solo quiero tener algo con que distraerme y alejarme de mis problemas al menos por un buen tiempo pero no me refiero a esos problemas que mientras los aplazas empeoran. Me refiero a las penas, las decepciones, los desaciertos, la impotencia. Todo esto causado por mis malas decisiones y también por el hecho de dejarme llevar por los demas. Cosa de la cual me cansé. Me canse de todo esto y en eso adjudico el hecho de que las cosas serian diferente si mi humor hacia los demás fuese distinto. Pero por más que pueda o intente cambiar el trato que tengo a lo demás, no puedo. No puedo dejar de ser tan amargado y frío porque si lo hago me convertiré en un chivo expiatorio, en alguien tan vulnerable que podrían destrozarlo solo con la mirada y yo ya he caído bastante, lo suficiente para saber que esa es la posición que debo tomar aunque no me guste ser así, aunque no quiera ser así pero que lamentablemente así se dan las cosas aquí.

Tal parece que soy la única persona que piensa que puede cambiar en algo su vida, escapar, alejarse de aquellos que te hacen mal, de aquellos en los que pensabas que podías contar con todo su apoyo cuando en realidad no son nada mas que palabras al viento y aquellos que simplemente no significan nada y que para no hacerles daño simplemente sigues en el juego cuando en realidad estas cayendo en un pozo sin fondo. Cambiar tu rumbo, tu rutina, conocer nuevas cosas, nuevos lugares, nuevas experiencias nuevas personas, pensar de manera distinta y a la vez acorde al resto, sin prospectos, sin prejuicios, al parecer soy el único y es por eso mismo que no me atrevo a cambiar nada porque al hacerlo solo, es como si en realidad nada haya cambiado por lo que es igual de frustrante que estar como antes Y gracias a eso me di cuenta que siempre en todo momento actúo a la defensiva por culpa de mis decisiones (ya sean buenas o malas).

Y ahora me di cuenta mientras escribía toda esta plegaria de mierda sobre, en realidad nada en común. Me di cuenta que mi mayor problema es contra la gente y en especial aquellos que están a mi alrededor; mi familia, mis compañeros, mis amigos y conocidos. Ellos me decepcionaron todos y cada uno de ellos han sido prueba irrefutable de la rabia y la impotencia que he acumulado y en consecuencia el odio que he sentido y siento hasta el día de hoy a todos y cada uno de ustedes.

sábado

This Week On RLO TV

Esta semana recolecté las frases y palabras más frecuentes y destacables:

Lunes:
desea donar un peso?
me fue mejor que ayer.

Martes:
Bip!
Fuguémonos
vamos a fumar que estoy chato
profe, que nota nos sacamos en la feria?

Miércoles:
Bip!
What does___mean?
vamos a fumar
me da lo mismo...

Jueves:
Bip!
huevón, no sé nada
luli-quiere-animar
la media perso!
oye, nosotros vamos a estar en Cetecom
veo que no saben nada sobre mí...

Viernes:
Bip!
profe, que nota nos sacamos en la feria?
siempre tengo una mala semana
ya no tengo nada más que hacer en este lugar (frase que me dije a mí mismo).


lunes

Lo que aprendo por odiar...

Te odio
Me odio
Los odio
Odio los celulares
Odio tener que fingir
Odio tener que llorar
Odio tener que reír
Odio suspirar demasiado.
Odio tener que odiar las cosas que sí me importan
Odio cuando decoran las casas con sillas Wassily teniendo un millar de diseños de sillas diferentes. Como odio esa silla.
Odio tener que saber que odiar es malo
Odio que me digan que odiar no es debido
Odio cuando me dicen que mi carrera es fácil
Odio no tener tiempo
Odio el calor
Odio cuando preguntan lo obvio
Odio cuando comentan lo obvio
Odio que me digan que soy amargado, como si no me conociera lo suficiente.
Odio que me abracen…cuando no estoy preparado.
Odio que me hablen leseras por MSN.
Odio cuando en la radio nunca dicen la hora exacta, siempre es un minuto antes o un minuto después de la hora puntual.
Odio despertar tarde
Odio levantarme tarde
Odio el Transantiago
Odio el Metro
Odio tener que hacer cola para entrar al metro, para pasar la tarjeta y luego bajar al anden y dejar pasar tres vagones antes para al fin poder subirme a uno.
Odio cualquier otro tipo de música que no sea la mía.
Odio que los grupos o solistas que escucho no conozcan Chile
Odio el café del Dunkin’ Donuts
Odio el paté.
Odio el jugo de Naranja-Plátano.
Odio los muros de mi pieza.
Odio no tener cargadas las pilas de mi cámara cuando quiero sacar una buena foto.
Odio mi pelo limpio.
Odio no saber que ponerme.
Odio tener que tomarme un yogurt como desayuno mientras salgo apresurado de mi casa.
Odio mirarme al espejo y decir que nada ha cambiado
Odio pensar en que algo podría cambiar de mi vida
Odio a los bebés
Odio a esas empalagosas parejas que nunca se despegan una de la otra.
Odio haber olvidado otras cosas más que odio.
Odio a los Couch Potato

Odio no saber lo que siento
Odio haber mentido con lo anterior

Odio no poder decir lo que siento.


martes

Happy Monday's

Tengo muchas ganas de escribir, comentar, expresar algo pero que ciertamente no sé proyectarlo adecuadamente. Losé reconozco que aun soy parte de los débiles y carezco de poderes para resistirme antes las cosas.

El lunes hice (mas bien dije) algo que no tenia planeado, al menos, no a estas alturas de mi vida pero fue algo que me dio confianza a seguir contando. El punto es que definitivamente fue alentador y aliviante el hecho de tener receptores tan considerados y consecuentes incluso me sorprendió todo ese lapsus entre el café, los pasteles, la música, todo. Aun así, esto no quiere decir que de hincapié a seguir contando esto a los demás, el estar promoviendo cosas no es lo mío, menos cuando se tratan de asuntos míos.

No saben el gusto que me daría que supieran muchas cosas mas sobre mi, indiferente si les importa un rábano o no, sino por el hecho de que aprendan algo sobre estas.


jueves

Yo hago, tu haces, el hace, nosotros hacemos...

Según el estudio de una universidad noruega si las personas fueran al menos 10% mas responsables en cualquier ámbito (ya sea desde levantarse a la hora hasta devolver un favor) nuestra vida seria un 40% mas fácil, satisfactoria y un sinfín de otras cosas mas. El punto es que no pude leer por completo el artículo porque me puse a pensar en algo respecto a eso. Si bien, esas responsabilidades bien cometidas facilitan nuestro ritmo de vida un 40% ¿qué sucede con el otro 60%? obviamente ese articulo se pudo haber referido a lo negativo de ese 60% pero yo pienso lo contrario. Talvez parte de ese porcentaje restante resulten ser oportunidades no planeadas e inesperadas; yapas, descuentos en tus compras, una moneda mientras caminas atrasado a clases, etc. Por eso y la mayor parte del tiempo siempre pienso que las irresponsabilidades son errores predestinados a favorecernos o en su gran mayoría a perjudicarnos pero ambos casos vislumbran algo en que pensar.

A todo esto leí otro artículo de un estudio británico que menciona que las personas han acelerado su ritmo de caminar en la ciudad en un 10% en la última década (realizado en 32 ciudades).